Delphi
- lectura de 2 minutos - 308 palabrasTres horas de viaje para empezar el día desde Kastraki hasta Delphi, destino de hoy. El Delphi moderno no es gran cosa, ni siquiera llegaría a calificarlo de ciudad; pueblo grande tal vez. El Delphi antiguo en cambio era el centro del mundo: ninguna decisión importante se tomaba sin antes ser consultada con el oráculo. Esto dotaba a Delphi de gran riqueza y hoy quedan sus ruinas. Aunque mucha gente se aloja en sitios alrededor de Delphi, nososros nos quedamos en la propia ciudad en el Hotel Nidimos, que recomendamos mucho por el buen trato y las habitaciones espaciosas y recientemente renovadas. Además tienen un parking donde pudimos dejar el coche y las maletas tranquilamente mientras visitábamos las ruinas antes del check-in oficial.
El complejo de Delphi consta de las ruinas (principales, gymnasio, templo de Athenea) y el museo, pudiendo comprarse un ticket combinado. Hay que llevar agua porque casca mucho el sol y hay sombras pero no excesivas. Nosotros partimos la visita en dos y tras ver las ruinas principales fuimos a comer a la taverna Vahko, también muy recomendable por sus vistas sobre el mar. El museo tiene mucho más de lo que creíamos, gran parte de los capiteles, frisos y muchas estatuas están expuestos en él. Al igual que en la guía, no sabría decir si mejor museo antes o después.
Acabadas las visitas fuimos a Galaxidi, a pocos kilometros de Delphi pero bajando la montaña y en la costa. Lo primero, el baño de rigor esta vez en una playa de piedras donde el mar estaba como un plato y caliente. El pueblo de Galaxidi es muy agradable, con dos puertos y casas cuidadas. Muchos atenienses vienen aquí a pasar su fin de semana. Resulta más que agradable para pasear y tomar algo.
Mañana iremos a Olympia, a correr en el estadio olímpico original.