Viaje a Capadocia
- lectura de 2 minutos - 324 palabrasEl viaje empezó muy temprano por la mañana, a las 4.00 en pie, a las 4.15 a barajas. El check-in online tiene la ventaja de que te puedes saltar toda la cola e ir directamente a facturar las maletas, así que en Barajas nos sobró mucho tiempo. El mismo tiempo que nos faltó en Amsterdam, donde sólo teníamos una hora y anduvimos bien de tiempo pero con prisa.
Volamos hasta Estambul con KLM. KLM mola, hay mucho espacio para las piernas y yo no eché de menos el volar en la salida de emergencia (te cobran 30€). Da gusto ir en un sitio donde te caben las piernas, no como en Iberia.
Comimos en el aeropuerto de Estambul (Ataturk) una hamburguesa muy cara, pero teníamos hambre. El vuelo a Kayseri también fue bien, esta vez con Turkish Airlines. En el vuelo conversamos con un turco un poco raro que nos dijo que lo mejor de Capadocia era Goreme (nosotros dormíamos en Uchisar) y se medio ofreció a llevarnos pero le dijimos que teníamos un coche alquilado. También nos contó que los turcos se pasan el día en el banco, curioso porque vimos muy pocos.
El aeropuerto de Kayseri está en obras y te llevan por sitios provisionales, hay fotos de la precariedad.
El coche… en fin, un Ford Fiesta bastante malo que no tira y con las ruedas hechas un asco.
El viaje de Kayseri a Uchisar son unos 70 km. Los turcos conducen mejor de lo que dicen las guías.
Encontrar el sitio donde dormíamos nos costó mucho y al final dimos con él andando. Primera impresión de sorpresa porque es muy diferente todo a lo que estamos acostumbrados. Nuestra habitación es una cueva. Como llegamos tarde y con hambre, la dueña nos hizo la cena: lentejas y una carne con alcachofas; todo típico turco, no estaba malo… de hecho ¡estaba bueno! Nos dio tanto que no nos lo pudimos acabar.
Mañana más.